miércoles, marzo 30, 2005

Día 16. Chipilés

De verdad que no hay tristeza que no curen las compras... y lamento tanto decirlo cuando hay quienes ni tiempo para pensar en las trivialidades de gente como yo... pero bueno, esas desgracias corresponden a otros asuntos y lugares.
La semana pasada, tras una etapa de chipilés (estado de ánimo tendiente a depresión, pero en un nivel totalmente controlable; de acuerdo con mi ditsionario personal), dirijí mi ser a un centro comercial sureño bastante viejo, como cuando va uno de niño a la tienda a ver pa' que le alcanza...
Todo un mundo de ofertas se me presentaba y en la mente sólo traía otra de las frases de aquella querida, muy querida persona, citada en blogs anteriores: "comprar algo, aunque sea pequeño"... No me alcanzaba pa' la primera temporada de Smallville (¡chin! ¿lo dije o lo pensé?); no me alcanzaba pa' los dvd's de las ediciones del director del Señor de los Anillos... y de pronto, ¡el reflector alumbró a los éxitos en inglés!, ¡los polvos mágicos cayeron! y ¡emergieron del estante los beats inconfundibles de aquel peloncito bonachón que algo tiene que ver con Moby Dick!... Hotel, edición con disco doble... "¡Venga a nosotros tu reino!", me dije. Hurgé en la bolsa derecha del pantalón --donde este mes guardo la morralla... sí, porque el siguiente mes guardaré la morralla en la bolsa izquierda, como Chabelo-- y apenas junté en la caja la cantidad exacta, pidiendo incluso que se cobraran cincuenta pesos que faltaban, de lo que quedaba en la tarjeta donde papá Slim me deposita...
¡Dios! Fui tan feliz... hacía tanto que no sentía el celofán desgarrarse en mis manos y que no distinguía con claridad el nombre de las canciones en el "librito"... lo disfrutaba enormemente. La emoción de niño revivía.
Ya en casa, fue otro asunto. Coloqué la caja junto a la torre de discos piratas "probados, calados"... ¡Pinche disco!, igual que todos. No hay nada nuevo. Tendría que escucharlo mil veces para enamorarme de alguna canción y no sentir que se fue al caño la lana. (Algún día contaré las veces que utilizo la palabra "enamorar" y sus derivados)
Entonces, el reproductor de discos tomó el segundo en turno: Ambient, el que venía de agregado... y mi mente despegó del sofá en que me hundía poco a poco.
Cuando desperté, una sonrisa grande me trajo de vuelta. La chipilés se había ido.
---
Y entonces, volví a escuchar el disco. El track 1, swear, sonó. Y entonces escribí:
Perdido entre paredes de cartón... tu sombra ilumina mis pasos.
Mi soledad se acompaña de los gritos y gemidos guardados en el ambiente.
Me recuesto en la imagen de tu cuerpo. Ya no existes, pero no importa...
Tus labios rozan mi cuerpo, aunque realmente estoy frente al espejo. Las sábanas me ofrecen tu piel, me dejan acariciarla con el rostro.
Aquí estás, aquí estuviste. Lo juro.

9 comentarios:

YO SOY EL QUE YO SOY dijo...

Pues para echar al costal de sincronicidades, descubrí que Moby tiene un blog y moría por decirte. Pero eso seguro ya lo sabes :(

Dantés dijo...

Es un milagro!!! sigues vivo!! y posteas!!!

Dantés dijo...

y sabes la dirección???

YO SOY EL QUE YO SOY dijo...

www.moby.com

YO SOY EL QUE YO SOY dijo...

Ve a donde dice JOURNAL

CardCaptor dijo...

Hola.

En mi humilde opinión, el cd no es tan bueno, lo cierto es que no encuentro mejor disco de Moby que 18, ya que dicen que el mero mero es play.

En fin pues yo lo compre también y no me gustó del todo. Asi que prefiero seguir oyendo a la Bebe, una españilita que se está dando a conocer en ritmo son. Pero es muy buena

por otra parte (si la otra parte) descubrí un blog que de seguro te gustará más que el de Moby, aparte de que te instruirá mucho en eso que creo no has de tener mucha experiencia.

la direcc es:

http://telorompo.blogspot.com/

Es lo más este blog. Sólo que pide permiso a tus papás para ingresar a él y velo en compañia de un adulto.

Chitiva dijo...

Maldita computadora que no me deja postearte.
Lo que te quería decir es que todo es valido para combatir los estados Chipilescos.
Confieso tener mis propios métodos para combatirla.
Pon mucha música. Se vale. Pero no olvides nunca el cuaderno para escribir lo que sale del corazón y de las tripas.

Gade Herrera dijo...

Qué onda compadre... por ahí me pasaron tu dirección y desde entonces he tratado de verla completa pero no he podido. Ni pex.

Me da gusto saludarte, cuidese y recuerde que:
Rigo es Amor porque el amor es ciego (o lo era).

Dantés dijo...

Ah que bonito eso de los comentarios y más bonito recibir nuevas visitas... Pásele a lo barrido joven!