miércoles, septiembre 28, 2005

Día 40. Quiromancia

"No has sido noviero, sólo aparecen dos mujeres en tu vida: una novia a los 17 años y otra persona. ¡Pero sí eres un caliente!", gritó aquel buenhombre a un costado de la explanada de la Facultad (leáse: zona del puesto de dulces de siempre) mientras sostenía mi mano izquierda y mi rostro comenzaba a enrojecer en forma considerable por el grupo de personas conocidas que se encontraban a un lado. Minutos antes había accedido a que me leyera la mano...
Tras el rapto de soledad en el pasado "post", fui presa de las garras del camino sin dirección y llevome al encuentro inesperado con aquel hombre alto, grueso, cabello chino y escaso, tez blanca, de voz extraña por el ritmo al hablar y ojos marrón que difícilmente sostenían por mucho tiempo la mirada: un típico humano "raro"... de 39 años de edad, como nos confiaría después al señalar repetidamente a las mujeres presentes que no era su intención ligarlas cuando las describía de tal o cual manera.
"Te diré cómo escoger a tus futuras parejas para que no tengas problema alguno con ellas... lo que te diga es para que sepas cómo enfrentar tu futuro; las líneas de la mano cambian pero las energías no...", afirmaba seguro de sí.
¡Cómo podía ser tan agraciado! ¡Este hombre me traía la verdad, me iluminaba con su luz!
El tiempo pasó, el futuro mencionó y no pude hacer más que darle mi "cooperación voluntaria", pues finalmente aquel mesías me había hecho reír como desde hace mucho no lo hacía.
Ya el tiempo dirá si su lectura fue cierta o no... mientras tanto, echaré sal sobre mi hombro y supongo seguiré sin ser noviero... ¿será?

domingo, septiembre 25, 2005

Pasa el tiempo y se acostumbra uno a su soledad, incluso se llega a valorarla de tal manera que cuando algo intenta cambiarla lo rechazas, como a los organismos extraños en el cuerpo. ¡¿Por qué no hemos creado anticuerpos aún?!
Dice Sábato: "tener fe es el coraje de sostener la duda". Y más que coraje es fuerza. Hay momentos en los que verdaderamente se desfallece sin más consuelo o fe que aquello de que en algún momento algo mejor vendrá, pero eso es también masoquismo: "sufrir para merecer".
¡¡Maldita mente que lastimas cuando el corazón no puede más!! ¿Por qué exiges tanto de ti y de mí? ¿Por qué los estúpidos reclamos y escudos para ser feliz? ¿Cómo se rompe el hechizo de la decepción?
Entonces llegan de nuevo aquellas notas que palpitan, que viven por sí mismas y que reaniman los latidos y te impulsan a seguir nuevamente con tu soledad un rato más.

jueves, septiembre 22, 2005


Las 'Wilis' de Giselle en Bellas Artes. Los seres etéreos, hermosos, de ensueño; que conquistan y cortan el aliento. Aquellas que obligan a los hombres a bailar para entrar en su mundo, en su danza, hasta que mueren. Aquellas como cualquiera que vive y conquista dejando morir con el suspiro del último beso.

lunes, septiembre 19, 2005

Día 39. "Por eso no puedo así, quitar mis ojos de ti..."

Cuántas veces no han sido tema de discusión y de risa las traducciones o castellanizaciones de palabras extranjeras en nuestro país. Basta con sintonizar 92.1 de frecuencia modulada y como todos los defeños (defequenses, mexica-no*, capitalinos o como deseemos ser nombrados) sabemos, no faltara la voz de Universal Stereo diciendo algo como "Acabamos de escuchar a Las piedras rodantes con Píntalo de negro" o "Enciende mi fuego con Las puertas"...
En este fabuloso "puente" (dícese del mote con que denominamos los mexicanos al pretexto de la unión de uno o varios días de asueto con el fin de semana) me di a la fabulosa tarea de encontrar el mayor número de versiones posible de mi segunda fabulosa canción favorita en la vida: Can't take my eyes off you.
Hasta ahora llevo 20 versiones distintas: entre ellas una de Save Ferris que según esto todavía no sale a la luz pública, una de Muse, una de Elis Regina, la clásica de Frankie Vallie y Boys Town Gang, pero ninguna como la versión en español. ¡Sí, en español! Suena como cuando el adorable Nat King Cole hizo sus versiones de canciones populares mexicanas: "No puedo creer que es verdad, que tanta felicidad haya llegado hasta mí y simplemente aprendí que el cielo siento alcanzar pensando que voy a amar, por eso no puedo así quitar mis ojos de ti... Pa ra pa ra pa ra pam pam... Te quiero mucho y bien compréndelo, Te quiero mucho, con toda intensidad te necesito, dígote la verdad...". En el siguiente post de audio que haga prometo subir un pedacito
(por aquello de los derechos de autor).
Estoy en verdad embelesado con las versiones (que de paso hice lo mismo con otras canciones favoritas) y no paro de emocionarme y bailar y cantar y sobretodo, "no puedo creer que es verdad, que tanta felicidad haya llegado hasta mí" y no puedo evitar pensar en aquellas personas que han hecho que en verdad no pueda quitar mis ojos de ellas.
Si gustan cooperar a la causa, favor de comunicarse y aportar su versión.
Sean felices, "dígoles la verdad".

*Breviario: Puse asterisco en mexica-no porque según dijo una "compañera" universitaria, en la interesantísima clase de México, nación multicultural, que quizá en algún momento al decir mexicano renegamos de nuestro pasado y crecemos negando que alguna vez fuimos o somos mexicas.

domingo, septiembre 18, 2005


© Organista
Para los condenados a muerte y para los condenados a vida no hay mejor estimulante que la luna en dosis precisas y controladas. Sabines.

miércoles, septiembre 14, 2005

Aún recuerdo aquellos ojos profundos, malos, sucios, con la idea de desgarrar lo que a su paso encontraran; contrastantes con la ternura de su rostro de niña. Y esos labios mordiéndose entre sí mientras las manos se movían a placer y encontraban cómplices frente a ellas. Luego, el espejo, donde se cruzaban nuestras miradas y hacían el amor con las manos encajándose en la piel; jugando con todo lo que hallaban... ¿Cómo es que nos perdimos?

domingo, septiembre 11, 2005

Día 38. Reflexiones de domingo: ¿de qué se trata la vida?

Biológicamente: nacer, crecer, reproducirse y morir.
Socialmente, en teoría, "el respeto al derecho ajeno es la paz".
Filosóficamente, según recuerdo mis someros principios de filosofía en la Facultad de Ingeniería(!), dejar "huella". El sentido de la vida del hombre es la inmortalidad encontrada con lo que deja uno tras de sí cuando muere.
Católicamente (ja! buena palabreja), de "amar a Dios y a los demás como a ti mismo" y buscar que tus hijos hagan lo mismo pa' que cuando te mueras, vayas al cielo.
Espiritualmente, crecer y encontrar la perfección. Hacer el bien y buscar el sentido que tiene esta vida en este momento para "juntar puntos", perfeccionar el "don" que toca a este momento para llegar a ser un espíritu que trascienda esta dimensión.
La pregunta es: ¿cuándo la disfruta uno?
Sé que todo esto es una visión reduccionista de las cosas, sólo es un débil argumento para llegar al hecho de que no se es claro cuando de disfrutar se trata. Nos perdemos en la finalidad última y perdemos el presente.
Alguien diría: ¿y el hedonismo? Sí, pero ¿y aquellos que no tienen posibilidades (sociales) de sentir placer en este mundo?
Los filósofos me contradirán y ¡eso es lo que espero!
¿Ustedes cómo disfrutan la vida? Yo, amando.

domingo, septiembre 04, 2005

Día 37. "El Terry"

Advertencia: Este "post" puede resultar demasiado cursi, léalo bajo su propio riesgo.

Querido diario:
Hoy es un domingo feliz.
En el reproductor de la computadora resuena "El sirenito" que tanto me hacía reír y que no podía escuchar con libertad pues decían que era música "de vecindad", pero lo cierto es que a mí me mueve el bote automáticamente.
Afuera, el sol lucha con las nubes para dejar lo gris a un lado. Y también, afuera está "el Terry".
Dicen que cuando le va mal a uno no hay ni perro que le ladre. Pero yo soy dichoso, pues afuera de mi casa siempre hay un perro tan simpático, tierno, "noble" y sobretodo, protector, que todos los días mueve la cola al verme y se acerca para que lo acaricie.
Yo creo que el solovino está enamorado de Layla, mi perra, pues siempre que sale se entusiasma y brinca y chilla... pero ella es pareja de mi perro; bueno, al menos eso creemos, pues somos como aquellos que casaban a sus hijos por conveniencia y que éstos se rebelaban.
"El Terry" siempre me cuida cuando llego en las noches: si alguien se acerca le enseña los colmillos y lo hace rodear la entrada para que no se atreva a hacerme daño.
Si vieras que bonito perro.
La semana pasada me dijeron que vino la perrera... y sentí tanta tristeza.
Pero, horas más tarde apareció él moviendo la cola, ¡había sido rescatado por algunos vecinos!
Sólo quería que supieras que "el Terry" existe y quizá siempre habrá uno para protegernos en algún lado sin que lo sepamos...

jueves, septiembre 01, 2005

Escuchando Yesterday en la voz de Frank Sinatra y los dedos que escriben:

La oscura y solitaria calle, con la espesura de la niebla cayendo sobre mí... ¿por qué tuvo que ser así? Tanta tristeza produce tu imagen en mi mente... si tan sólo hubieras evitado que me fuera... estaría haciéndote ahora mismo el amor, acariciándote, enamorándome nuevamente de ti...