Libertango
Hay una manía que tengo. A veces, cuando la emoción es grande, escucho una pieza, una canción, y dejo a mis dedos correr sobre las teclas. Es ahí cuando los sonidos se convierten en letras y todo comienza. Algunas veces es una porquería, pero la mayoría son proyecciones y verdades disfrazadas.
Si tienes la oportunidad de escuchar o ya lo has hecho, el Libertango de Piazzola, estas son las imágenes que trae a mi cabeza:
El mar... las olas rompen intensamente mientras bailamos al ritmo de las luces que tintinean en el cielo.Tu rostro, terso, invita a probar tu intimidad... Se desata la pasión y los cuerpos se unen con un solo movimiento... Luces nocturnas que acompañan a los enamorados.
De un lado a otro, caminamos, corremos.Te siento aquí, tan profundamente. La inmensidad del mar, tu inmensidad, la siento aquí mismo, dentro de mí. Nos elevamos juntos.
Soñamos despiertos y nos abrazamos.