Y entonces, frente a la tumba de Morelos, Galeana y Matamoros; Don Antonio, el guía apasionado del Monumento a la Independencia, reflexionaba sobre el resultado del heroismo insurgente en nuestra vida actual. No en vano, contaba, "Napoleón decía que con ellos tres podía conquistar el mundo"...
Y llegó el momento de subir. Tantos años pasando alrededor de él, tantos triunfos celebrados, tanta gente alrededor cimbrando la avenida, marchas, pláticas... Más de 180 escalones...
Aunque no tengo ya "una mujer clara que amo y me ama", pude ser feliz en este día, en este país libre a pesar de todo... pude sentir el viento desde lo alto y mirar al Castillo de mi adoración en esta ciudad "inhabitable e inevitable", como diría Gonzalo Celorio.
Si ustedes quieren vayan sábados y domingos de 10 a 13:30, pues a pesar de que cierran hasta las 15 horas, la lista en que uno se apunta para subir está hasta las 13:30 horas. Vale muchísimo la pena la espera bajo el sol.