Día 131. Edad
De unos años para acá me ha dado por asegurar que la edad de las personas es simplemente actitud frente a la vida... Y estoy más que convencido de ello.
No se trata de querer ser adolescente o joven para siempre, como aquellos con la crisis de los 50 que se compran autos deportivos y visten chamarras de cuero buscando la juventud mal vivida o las siempre jóvenes mamás que no dejan de acompañar a sus hijas al antro.
Se trata de asumir quién eres y contar los momentos felices, no más.
Sin embargo, hay cosas que te hacen recobrar más bien el sentido de la cantidad de tiempo que ha pasado.
De pronto, comienzas a encontrar a aquellos con quienes compartías una cerveza, un café o una plática breve y un saludo mientras cambiabas de salón en la prepa o la Facultad. Aquellos a quienes no les veías todavía "cara de nada" pues apenas pensaban (y tú con ellos) en pasar el año escolar.
Los reencuentras con el título de abogado, doctor, diseñador, arquitecto, músico, jefe... Entonces caes en cuenta que, efectivamente, han pasado los años y
aquellos jóvenes soñadores se convierten poco a poco en adultos realistas.